¿Sois ricos? Socorred.
¿Carecéis de fortuna? Consolad.
¿No tenéis influencia? Amad.
¿Vivís solos, aislados? Orad.
¿Formáis parte de una familia muy humilde, falta de medios, poco apreciada? Estad dispuestos a dispensar los menores servicios que juzguéis útiles o que os pidan, sin ruido, sin aparato, y aun sin que lo adviertan los demás.
Sed siempre el ser que da o procura dar.
Sea el dar para vuestro pecho: una necesidad.
Una buena palabra dicha sencillamente es un don. Un objeto prestado, es un don.
Una expresión de urbanidad, es un don.
Una sonrisa que da las gracias o expresa una buena acogida es un don.
Una molestia evitada, es un don. Un dato proporcionado, es un don.
Retirarse un poco para no molestar, es un don.