Artículo del día

EL QUE ESTÉ LIMPIO DE PECADO…

Se ha puesto de moda criticar al Obispo emérito de Solsona, no tanto por haber dejado el Obispado con la previa aceptación de Roma, como por una relación amorosa que parece llevarle a un matrimonio civil.  Y me he acordado del Kempis cuando escribe: “Si vieres alguno pecar públicamente o cometer culpas graves, no te debes juzgar por mejor, porque no sabes cuánto podrás perseverar en el bien. Todos somos flacos, mas tú a nadie tengas por más flaco que a ti”.

Me gustaría precisar un poco en la relación Moral-Ley Civil. Hay actos plenamente condenados por la Moral católica y en cambio permitidos por la Ley civil: aborto, eutanasia, destrucción de embriones, parejas de un mismo género etc… Hay otros en que coincide totalmente la Moral católica y la Ley Civil: condena de la pederastia, robos y estafas etc… y otros  ordenados por la Moral  católica y que son indiferentes ante la Ley civil: el Orden sagrado por ejemplo. Estos, en los casos más graves, se deja la resolución a la autoridad del Papa. El caso del ex Obispo de Solsona,  tan criticado con palabras duras, acerbas y despiadadas, es de exclusiva competencia del Papa.

¿A qué viene tanta rasgadura de conciencias? A mí, lo confieso, me repugna mucho más un católico que practica el  aborto o la pederastia, que un Obispo que se enamora y se casa. En los supuestos en que la Moral y la Ley civil chocan, como ciudadano, puedo y debo pronunciarme, pues, antes que ciudadano soy católico. Pero en los casos en que la resolución forma parte de la autoridad exclusiva de la jerarquía católica, ¿a qué viene tanto escándalo?  Ya resolverá cuando quiera, y lo hará conforme a la ley eclesiástica.

Son los mismos que critican, y con razón, al Papa cuando se mete a predicar sobre temas que no son de su competencia, como economía o ecología, por ejemplo. Pero al mismo tiempo estos críticos incurren en el mismo error: critican ellos temas que no son de su competencia sino de la jerarquía eclesiástica.

Se debe tener en cuenta lo que he transcrito del Kempis. Mientras vivimos, no tenemos asegurada la salvación eterna.

Jaime Solá Grané

About the author

Noticias Cristianas

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: