No importa lo que hayas hecho mal, Dios siempre estará allí intentando que tu le ames un poquito, y con ése amor correspondido al suyo hará el resto para que vuelvas a Él. Cuando los placeres del mundo y los pecados te atrapen recuerda que Él está a tu lado esperando que le digas: «Te amo, quiero volver contigo. Ayudame porque mis enemigos no me dejan estar a tu lado» y Él hará «everything» (todo)
Para comentar debe estar registrado.